Quiero correr, quiero saltar, quiero jugar

Pero algo me ata y no puedo despegar 
quiero reir, quiero cantar, quiero llorar
pero el silencio se apodera y queda
solo callar
Afuera el sol es el techo de todos 
aunque acá solo nos cobija un frío
solitario y parece ser eterno
No se que peor? las sombras de este lugar 
o el as de luz que se presenta
como recordándome que la oscuridad
no es un todo y que hay algo más que
solo eso.
Me abrazo a la soledad y descanso en la nada,
me burlo de mí mismo y converso con mi sombra.
y me pregunto quién es ese que se refleja
en mi espejo?
Ya no quiero correr, ya no quiero saltar ni tampoco jugar
es que pocas fuerzas me quedan
ya no se si me alcanzan para soñar
medito en mi cordura la cual
me parece un absurdo
mi imaginación se desvanece
y mi noción del tiempo escaso
pero me encuentro de pie a pesar de los golpes
eso es lo bueno
y que logro caminar en un camino
que me lleva al mismo destino
llego a la mitad, tengo sed
y mis párpados se cierran en un sueño profundo me envuelve
y mi cama una piedra.
El amanecer me despierta o al menos eso creo
ya que parezco estar en un sueño
donde recobré mi fuerza
y volvieron mis ganas de correr, de saltar y también jugar
es más lo estoy haciendo
lo logro y están todos allí
quienes esperé tanto se ríen conmigo
juegan conmigo y también saltan conmigo
no quiero que esto termine más
soy feliz acá, este es mi lugar
el sol me da cielos y luz el camino
tiene por destino mi felicidad
ya no hay sombras y las risas
son la melodía mejorada
ven conmigo! te invito a jugar
a que soltemos y corramos por siempre juntos.

Nicolás Nuñez


No hay comentarios:

Publicar un comentario